Nanta ha dado un nuevo paso en su apuesta por la máxima calidad y seguridad de sus productos tras convertirse en la primera empresa de producción de piensos compuestos de nuestro país en lograr la máxima certificación de seguridad alimentaria, la FSSC 22000, dentro de la categoríaProduction of Feed,para ocho de sus fábricas en España y Portugal.
Para su obtención, desde la compañía explican que han asumido una serie de requisitos adicionales hasta ahora no contemplados, como la “Mitigación del fraude alimentario” y el “Food Defense”, orientados a la prevención de acciones o fraudes intencionados que pudieran comprometer la inocuidad de los alimentos, así como un requisito de “Formulación de productos”, que tiene en cuenta el control de sustancias, nutrientes o ingredientes que pudieran tener efectos adversos en los animales o afectar a la seguridad alimentaria.
Para ello, han llevado a cabo un análisis de vulnerabilidad y han implementado las medidas preventivas oportunas, unprocedimiento de control para evaluar los factores de riesgo e implantar medidas de control adecuadas y efectivas en cada momento, orientadas a hacer frente al fraude alimentario, incluida la auditoría de toda la cadena de valor, desde los diversos proveedores y su cadena de suministro, hasta la integridad de los productos y sus envases.
Así mismo, Nanta ha hecho inversiones en las fábricas certificadas,enfocadasa la protección de las instalaciones, y ha querido involucrar a todos los departamentos y dedicar recursos a la formación de todos sus empleados en el manejo y aplicación de los nuevos protocolos, tareas y procedimientos establecidos. El objetivo es cumplir con los nuevos estándares de calidad y minimizar los riesgos del fraude alimentario que, en este caso, podría afectar a la salud de consumidores y animales, además de producir un impacto negativo sobre la reputación y estabilidad económica de las operaciones del grupo.
La FSSC 22000 es una certificación voluntaria de gestión de la seguridad alimentaria concedida por Aenor que supone una ampliación importante del actual sistema de la compañía, que pasa a adaptarse a la nueva versión de la norma ISO 22000 (2018), junto con el cumplimiento de una especificación técnica para los prerrequisitos (ISO TS 22002_6 2016) y para los requisitos adicionales exigidos por FSSC para el sector de la alimentación animal.
